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La actualidad no suele mandar aquí, pero esta vez vamos a ver si somos capaces de aprovecharnos de todas esas cosas modernas como son el SEO, el posicionamiento web y los motores de búsqueda. Por eso hoy venimos a decir que Matías Almeyda es el nuevo entrenador del Sevilla FC. Pero ojo, que podríamos hablar aquí de exclusiva poniendo la palabra en negrita y mayúsculas, franqueada por exclamaciones, colores y luces estrambóticas. Pero no, esa no es nuestra pelea.
Lo nuestro es bucear entre los recuerdos, y sobre todo, callar a más de uno que ya estará diciendo aquello de “y qué sabrá Almeyda del Sevilla”. Ay queridos jovenzuelos, si viajamos a finales de los noventa podremos encontrar en la hemeroteca la llegada de este centrocampista argentino que venía de destacar en River Plate a las filas del Sevilla FC. Y nada más y nada menos, que tras rechazar una oferta del Real Madrid, o al menos así lo señala Wikipedia.
Si mi memoria no me falla – porque en aquel año 1996 en el que llega Matías Almeyda al Sevilla yo tenía doce años, – eran tiempos en los que Antena 3 tenía un porcentaje del accionariado del equipo andaluz. Recordar que la cadena privada de televisión era uno de los propietarios del club no es tema baladí, porque tener un canal de televisión de esa envergadura era poseer una gran arma propagandística. Y de esa relación viene mi recuerdo. Ojalá alguien que lo lea pueda confirma si esto existió o no, pero en mi cabeza sigue viva la imagen del anuncio de la presentación de Almeyda como jugador de Sevilla. La cadena de los Sorpresa Sorpresa o El gran juego de la oca, anunciaron a bombo y platillo el fichaje de una especie de nuevo Maradona. Un mesías que venía a hacer las delicias de los seguidores de la liga española. A mi me convencieron.
La realidad es que el paso de Matías Almeyda por el Sevilla fue más que discreto. De hecho, en mi cabeza asocio poca magia a esas botas, pero mucho pundonor, entrega y juego al límite del reglamento tras aquella engañosa melena tan redondianda (peinado posterior a su llegada, pero necesitaba decir lo de redondiana). Lo cierto es que en España no triunfó, pero sí en Italia. Después de una campaña aciaga como sevillista, acabó firmando por la Lazio y allí sí que se consagró, logrando hacer carrera en varios conjuntos de la Serie A, antes de volver a Argentina, para después pegar un atraquito en tierras noruegas.
Al Sevilla llega como entrenador tras haber dirigido al AEK Atenas, pero el dato clave del Almeyda entrenador está en una situación totalmente paradójica. Porque curiosamente, no se entendería la existencia del Almeyda técnico sin la existencia del Tano Pasman. ¿Os acordáis del Tano Pasman? Aquel tipo que era hincha de River al que grabó su familia para ver como reaccionaba en el encuentro ante Belgrano que acabó con el descenso de River. En aquel equipo Almeyda era capitán. Tras el descenso, al más puro estilo Luis Aragonés, el centrocampista colgó las botas y cogió la pizarra para devolver al equipo a Primera División.
Almeyda devolvió a River a la élite del fútbol argentino, pero los malos resultados acabaron poniéndole en la calle. Desde entonces ha entrenado a Banfield, Deportivo Guadalajara (el de México), San José Earthquakes y AEK Atenas. De nuevo la melena redondiana vuelve al Sánchez Pizjuán. ¿Celebrará Almeyda las Navidades en la estación de invierno o verano? ¿Devolverá al Sevilla a la parte alta de la Liga o surgirá un Tano Pasman andaluz? Y lo más importante, ¿alguien poseerá en algún VHS el video de Antena 3 anunciando la presentación de Almeyda con el Sevilla?
